Jóvenes, mujeres, hombres con kipa, representantes del movimiento conservador judío y algún transeúnte que pasaba por el Congreso formaban parte de la vigilia que los líderes de la comunidad judía argentina convocaron para esta tarde frente al parlamento argentino donde aún se debatía sobre el memorándum de entendimiento firmado con Irán en relación a la causa AMIA.

Al principio se vivió un momento de confusión cuando los manifestantes comenzaron a llegar a la plaza y se encontraron con el palco armado para el acto convocado por la titular de APEMIA, Laura Ginsberg, quien desde la avenida Rivadavia transmitió su rechazo al acuerdo con Irán.

Una parte de los manifestantes escuchó el discurso de Ginsberg aunque lentamente los miembros de la comunidad judía se fueron juntando sobre la avenida Entre Ríos, justo frente a la explanada del Congreso para expresar su rechazo a la propuesta del Gobierno orientada a resolver la causa por el brutal ataque terrorista de 1994.

“Estoy acá para que no me engañen más. Hay muchas cosas que me ponen mal cuando escucho estos discurso y esto no va a traer nunca una solución al problema por la falta de esclarecimiento del atentado”, dijo Elisa, quien rechazó lo sostenido en el acto de Gingsberg en el que se insistió sobre una presunta “conexión entre el Estado de Israel y el Mossad” con la voladura de la AMIA.

Orit, quien vive en Israel y se encuentra de visita en Buenos Aires, fue sorprendida por este cronista en momentos en que, en forma silenciosa, se pasaba del acto de APEMIA a la vigilia que la comunidad realizaba frente al Congreso. “Voy donde está la gente de la comunidad, tampoco coincido con la conexión con Israel y el Mossad, solo vengo a apoyar a los familiares por los 85 muertos”, dijo Orit mientras caminaba hacia al sector que tenía en ese momento como figura visible al rabino Sergio Bergman.

Fue justamente el rabino y legislador del PRO quien le puso un marco de acto y movilización al gritar con megáfono en mano “corruptos” a los diputados que dentro del recinto de diputados defendían el memorándum.

Tras el momento de euforia, Bergman transmitió a la gente que el encuentro es para “compartir el grado de frustración que sentimos todos”. “Las instituciones no organizaron un acto sino que convocaron a todos para que estemos en una vigilia para expresar el repudio, pero cuando llegamos a este lugar nos vimos sorprendidos con otro mensaje”, explicó el rabino en referencia al acto de APEMIA.

Mientras trataban de nivelar el volumen del megáfono, Bergman definió el memorándum como una “profanación” en la causa AMIA.

Un momento destacado se vivió cuando el rabino calmó a un grupo de manifestantes que atacaba al canciller Héctor Timerman y pidió que no se hagan nombres personales.

En este sentido, el legislador porteño consideró que la aprobación del acuerdo con Irán es “una traición a la patria y no tiene importancia ni la bronca, ni el dolor, ni las opiniones que tenemos sobre las personas sino la responsabilidad pública que asumen los funcionarios que le dan la espalda al pueblo y lo traicionan”.

Entre pancartas que decían simplemente NO sobre un fondo negro, el escritor Marcos Aguinis le explicó a la Agencia Judía de Noticias (AJN) que su presencia en el acto responde a que “en el Congreso se está cocinando algo, cocinado ¿para dónde? ¿Adónde lleva este guiso?”.

“Hay una sensación de que estamos viviendo un momento muy triste para la gente que será recordado con vergüenza y que es el avance a un precipicio”, advirtió Aguinis en referencia al memorándum.

Luego ya con megáfono en mano, el escritor afirmó que “el Congreso se ha corrompido” y aseguró que “el siguiente paso será ir por la justicia”. “Estamos entregando de una manera vergonzosa la soberanía argentina”, agregó.

“Percibo que acá están los argentinos que no tenemos miedo, que nos tenemos intereses espurios. Todos nosotros en este momento tenemos la obligación de constituir un núcleo vivo de la resistencia a favor de la democracia”, resaltó Aguinis.

El presidente de la Federación Argentina de Centros Comunitarios Macabeos (FACCMA), Jorge Slafer, describió como “un momento duro, difícil, con dolor” por este memorándum de entendimiento.

En diálogo con AJN, el dirigente expresó que “en absoluto” esperaban un hecho como el que se está dando y consideró que todo fue “sorpresivo”.

Slafer destacó la importante respuesta de la gente que se acercó al Congreso. “De todas formas con este acuerdo no se va a ningún lado, esto no tiene solución por lo menos de esta forma, sostuvo.

Mientras el “No al acuerdo” se repetía entre los manifestantes, un grupo de jóvenes de la Sociedad Hebraica se hacía notar entre los manifestantes. “Me parece importante estar aquí porque no podemos aceptar que se logre un pacto con Irán responsable del atentado. ¿Cómo podemos hacer un pacto en igualdad de condiciones?”, se preguntó la joven.

“Estoy aquí porque el tratado que quiere hacer la Presidenta con Irán está muy mal, no vamos a llegar a la justicia que estamos buscando, tengo 17 años y desde los 11 voy a los actos por los atentados a la AMIA y la Embajada de Israel y solo pedimos justicia”, expresó una de las chicas.

Por su parte, el diputado Gerardo Milman cuestionó la decisión del Gobierno de negociar con Irán. “Hasta en el contrato más simple uno requiere de una confianza (…) ¿Cómo poder creer en un régimen que niega el Holocausto y que durante 18 años dijo  que no estaba involucrado con el atentado?”, se preguntó.

En tanto, la diputada Victoria Donda aseguró: “No vamos a negociar ninguna vida, tampoco las de las 85 víctimas del atentado. No queremos que nos cambien vida por petróleo”.

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