A pesar de la eliminación de los detectores de metales en las entradas al Monte del Templo, los fieles musulmanes todavía se niegan a entrar en el recinto debido a la presencia de las cámaras inteligentes recién instaladas en el sitio.

Los fieles manifestaron que se negaban a entrar al lugar sagrado debido a la presencia de cámaras de seguridad y otros sensores y equipos de seguridad dentro del complejo. Las cámaras inteligentes colocadas en la Puerta del León, el punto de acceso central para los fieles musulmanes que subían a la mezquita de Al-Aqsa en el Monte del Templo, fueron removidas tras una decisión del gabinete de seguridad ayer por la noche.

Una declaración de Wakf, la autoridad religiosa musulmana que administra el Monte del Templo, aseguró que sólo entrarían en la mezquita de Al-Aqsa «una vez que todas las manifestaciones de agresión por la ocupación sionista sean removidas y la situación vuelva a ser lo que era antes de julio 14».

Grupos de activistas judíos del Monte del Templo publicaron fotos del sitio completamente vacío el lunes por la mañana durante las horas que los no musulmanes tienen permiso para visitar, en contraste con el gran número de musulmanes que habitualmente están presentes.

El lunes por la noche, el gabinete de seguridad emitió una declaración diciendo que había adoptado las recomendaciones de los distintos servicios de seguridad para retirar los detectores de metales a favor de las cámaras inteligentes, así como «otras medidas».

Hasta que las cámaras y otros requisitos estén en su lugar, el número de policías en el sitio será aumentado con el fin de garantizar la seguridad de los visitantes al Monte del Templo.

El gabinete asignó unos 100 millones de shekels para la ejecución del programa, que se completará en un plazo de seis meses.