Agencia AJN.-El ministro entrante de Seguridad Pública, Omer Barlev, dio el lunes el visto bueno a un polémico desfile nacionalista judío que estaba programado para el día siguiente en Jerusalem Este.

«En una democracia, está permitido y es importante manifestarse dentro de los límites de la ley», dijo Barlev al Times of Israel.

«Realizaremos una evaluación policial sobre los hechos y operaremos de acuerdo con las recomendaciones de la policía».

Tras una sesión informativa de evaluación con el comisionado de policía Yaakov Shabtai y funcionarios de seguridad, Barlev aprobó la ruta de la marcha.

«Tenía la impresión de que la policía está bien preparada y que se ha hecho un gran esfuerzo para salvaguardar el delicado tejido de la vida y la seguridad pública», dijo en un comunicado.

La marcha continuará por la carretera Sultan Suleiman antes de llegar a la Puerta de Damasco. Se llevará a cabo una danza de la bandera israelí en la plaza frente a la puerta. Los manifestantes, sin embargo, no entrarán en la Ciudad Vieja por la Puerta de Damasco.

Desde la Puerta de Damasco, los manifestantes pasarán por la Puerta de Jaffa y se dirigirán hacia el Muro Occidental a través de áreas periféricas del Barrio Musulmán de la Ciudad Vieja. Parte de la ruta se desviará a través del Barrio Judío por motivos de seguridad y para evitar el hacinamiento.

El lunes temprano, la Lista Conjunta, predominantemente árabe, de Barlev y el Primer Ministro Naftali Bennett, pidiendo que el evento, denominado la Marcha de las Banderas, se cancele de inmediato.

«Durante el último mes hemos sido testigos del aumento de las tensiones en Jerusalem que han provocado un terrible derramamiento de sangre y peligrosos estallidos regionales», dijo el partido. «Advertimos con anticipación que es muy probable que el evento reavive las tensiones y conduzca a una violencia y una escalada peligrosas».
El Departamento de Jerusalén de la Organización de Liberación de Palestina (OLP) advirtió el domingo de una «explosión» si la marcha pasa por la Ciudad Vieja de la capital.

La OLP dijo que los disturbios resultantes podrían extenderse más allá de Jerusalem a los territorios palestinos si se lleva a cabo la marcha, y dijo que las «autoridades de ocupación» no han aprendido de los cambios políticos en la región e internacionalmente.

Hamas también ha lanzado una advertencia a Israel de que responderá con fiereza a las «actividades regulares» del estado judío en Jerusalem, diciendo que no había descartado la opción de reanudar el lanzamiento de cohetes en ciudades de todo el país debido a acciones que considera objetables.

Las FDI ordenaron en respuesta a colocar baterías adicionales del sistema de defensa de misiles Iron Dome en el sur de Israel.

Los ministros votaron la semana pasada para permitir la marcha luego de un compromiso entre el primer ministro saliente, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Benny Gantz, con una ruta que se decidirá entre los organizadores y la policía.

El desfile anual marca la reunificación de la capital después de la Guerra de los Seis Días de 1967 y generalmente tiene lugar el Día de Jerusalén, que este año cayó el 10 de mayo. La marcha fue interrumpida cuando Hamas disparó cohetes contra Jerusalem desde Gaza, marcando el inicio de una amargo conflicto de 11 días.

Antes de la votación del gabinete, los funcionarios de defensa advirtieron a los ministros que la ruta tradicional del desfile podría provocar un recrudecimiento de las tensiones no solo dentro de la ciudad, sino también en Cisjordania, la Franja de Gaza y otros lugares de Israel.

La marcha anual también se suspendió en 2020 debido a la pandemia de coronavirus.