Agencia AJN.- La Cancillería de Brasil emitió ayer, martes, el comunicado «Acciones a favor del cese de hostilidades en Gaza», el cual de cuenta de que el «presidente Luiz Inácio Lula da Silva recibió al embajador palestino en Brasilia, Ibrahim Alzeben, para discutir la situación de los palestinos en la Franja de Gaza y (la Margen Occidental), después de transcurridos más de tres meses de la presente actual».

«El presidente Lula recordó la condena inmediata de Brasil a los ataques terroristas de Hamás el 7 de octubre de 2023. Reiteró, sin embargo, que tales actos no justifican el uso indiscriminado, recurrente y desproporcionado de la fuerza por parte de Israel contra civiles», continuó.

«Ya son más de 23 mil muertos, de los cuales el 70% son mujeres y niños, y hay 7 mil personas desaparecidas. Más del 80% de la población fue objeto de traslados forzosos y los sistemas de salud y suministro de agua, energía y alimentos están colapsados, lo que caracteriza el castigo colectivo», afirmó Itamaraty en base a datos sin confirmar que dio el representante palestino.

«El presidente resaltó los esfuerzos que realizó personalmente con varios jefes de Estado y de Gobierno para promover un alto el fuego, la liberación de rehenes en poder de Hamás y la creación de corredores humanitarios para la protección de los civiles. Destacó también la actuación incansable de Brasil en el ejercicio de la presidencia del Consejo de Seguridad a favor de una salida diplomática para el conflicto», añadió.

«A la luz de las flagrantes violaciones al derecho internacional humanitario, el presidente manifestó su apoyo a la iniciativa de Sudáfrica de pedir a la Corte Internacional de Justicia que ordene a Israel el cese inmediato de todos los actos y medidas que puedan constituir genocidio o crímenes conexos según los términos de la Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio», anunció Brasil.

Finalmente, «el gobierno brasileño reitera la defensa de la solución de dos Estados, con un Estado palestino económicamente viable que viva al lado de Israel en paz y seguridad, dentro de fronteras mutuamente acordadas e internacionalmente reconocidas, que incluyen la Franja de Gaza y (la Margen Occidental), teniendo a Jerusalem Oriental como su capital».