Agencia AJN.- El partido gobernante de Sudáfrica afirmó el jueves que apoyará una moción parlamentaria para suspender las relaciones diplomáticas con Israel hasta que acepte un alto el fuego en Gaza.

El Congreso Nacional Africano (ANC, por sus siglas en inglés) dijo que también respalda los llamamientos a cerrar la embajada israelí en Pretoria en protesta por la guerra que asola el territorio gobernado por Hamás.

«No podemos quedarnos de brazos cruzados ante las acciones genocidas del régimen israelí», declaró Mahlengi Bhengu-Motsiri, portavoz del ANC.

«El Congreso Nacional Africano aprobará una moción parlamentaria que pide al gobierno que cierre la embajada de Israel en Sudáfrica y suspenda todas las relaciones diplomáticas con Israel».

Sudáfrica retiró a todos sus diplomáticos de Israel a principios de este mes.

La guerra estalló con la masacre de Hamás del 7 de octubre, en la que unos 3.000 terroristas irrumpieron en Israel desde la Franja de Gaza, mataron a unas 1.200 personas y tomaron a más de 240 rehenes al amparo de un diluvio de miles de cohetes disparados contra pueblos y ciudades israelíes. La gran mayoría de los muertos y secuestrados cuando los hombres armados tomaron las comunidades fronterizas eran civiles, incluidos bebés, niños y ancianos. Familias enteras fueron ejecutadas en sus casas y más de 260 personas fueron masacradas en un festival al aire libre, muchas de ellas en medio de horribles actos de brutalidad por parte de los terroristas.

Israel declaró su intención de derrocar al régimen de Hamás y lanzó una campaña aérea, y posteriormente una ofensiva terrestre, afirmando que atacaba la infraestructura terrorista al tiempo que tomaba medidas para minimizar las víctimas civiles.

En Gaza, más de 11.500 personas han muerto desde entonces en la ofensiva aérea y terrestre de Israel, según el Ministerio de Sanidad dirigido por Hamás. Estas cifras no pueden verificarse de forma independiente y se cree que incluyen tanto a civiles como a miembros de Hamás muertos en Gaza, incluso como consecuencia de los disparos de cohetes de los propios grupos terroristas.

Pretoria apoya desde hace tiempo la causa palestina, y el ANC -el partido del difunto presidente Nelson Mandela- la vincula a menudo con su lucha contra el apartheid.

La moción parlamentaria, que se debate este jueves, ha sido presentada por el partido de la oposición Economic Freedom Fighters (EFF), de izquierda radical.

No es vinculante y necesitaría la aprobación del gobierno para aplicarse.

Sudáfrica no es el primer país que se plantea romper lazos en respuesta a la ofensiva israelí en Gaza, cuyo objetivo es destruir la capacidad militar y de gobierno de Hamás. El gobierno de Bolivia rompió relaciones diplomáticas con Israel a principios de noviembre, acusándolo de llevar a cabo «crímenes contra la humanidad» en Gaza, y Chile y Colombia retiraron a sus embajadores en Israel al criticar la ofensiva militar contra Hamás.

Los países árabes que mantienen relaciones diplomáticas y económicas con Israel han tomado medidas similares en las últimas semanas: Bahréin y Turquía retiraron a sus embajadores en Israel sin romper oficialmente sus lazos.

La declaración del CNA se produjo pocos días después de que la policía sudafricana disparara granadas aturdidoras y cañones de agua en Ciudad del Cabo para sofocar los enfrentamientos entre manifestantes proisraelíes y propalestinos.

A primera hora de la tarde del domingo iba a celebrarse una oración por Israel y los rehenes retenidos por Hamás en Gaza en una zona acomodada de Ciudad del Cabo, en la costa atlántica, un lugar popular para pasear en familia los domingos.

Sin embargo, varios centenares de manifestantes pro-palestinos irrumpieron en el acto, tras una manifestación pro-palestina que congregó a miles de personas en las calles de la ciudad portuaria y turística, según periodistas de la AFP presentes en el lugar.

Los manifestantes propalestinos, que llevaban keffiyehs y ondeaban banderas palestinas, ahuyentaron a los asistentes al encuentro de oración proisraelí, arrancaron sus pancartas y ocuparon el espacio.

La policía intervino con un cañón de agua y granadas de estruendo para dispersar a los manifestantes, y luego estableció un control de carretera para impedir que la gente entrara en la zona.

Durante semanas se han celebrado numerosas manifestaciones de apoyo a ambos bandos en las principales ciudades de Sudáfrica, donde el partido gobernante, el ANC, apoya fervientemente la causa palestina desde hace décadas.

Pero el país también cuenta con la mayor comunidad judía del África subsahariana, algunos de cuyos miembros han organizado vigilias y manifestaciones en apoyo de Israel. Miembros más izquierdistas de la comunidad judía, que participó activamente en la lucha contra el apartheid, han celebrado concentraciones en apoyo de la causa palestina.