Agencia AJN.- Los principales medios israelíes reflejan la controversia generada en la Argentina luego de que la embajadora de Israel Galit Ronen y el centro Simon Wiesenthal cuestionarán la posible inclusión de la figura del sanitarista argentino Ramón Carrillo en un billete que se proyectaba emitir por su presunta admiración por Adolf Hitler.

El diario The Jerusalem Post publicó un artículo titulado «Gobierno argentino bajo fuego por glorificar admirador nazi» y en la bajada señaló que «Ramón Carrillo, el médico pro-nazi, fue el asesor que acompañó al ex presidente Juan Domingo Perón como Secretario de Salud durante sus dos primeros mandatos. Ahora, su cara está en un billete».

El artículo cita también el mensaje que la embajadora Ronen publicó en su cuenta en Twitter que decía: “Cuando decimos «nunca más» es «nunca más», en referencia al Holocausto.

«El Dr. Shimon Samuels y Ariel Gelblung, directores de Relaciones Internacionales para América Latina en el Centro Wiesenthal, dijeron: ‘Rechazamos enfáticamente la elección de ese personaje, que manchará a Argentina con su imagen en su billete de más alta denominación'», señaló The Jerusalem Post.

Según la prensa israelí, «Carillo proporcionó refugio al fugitivo danés y al médico del campamento de Buchenwald, Carl Peter Vaernet, permitiéndole continuar con los experimentos con homosexuales para ‘curarlos'».

«Vaernet era un criminal de guerra que era buscado por los experimentos médicos que realizó con prisioneros homosexuales en campos de concentración nazis. Sirvió al jefe de la Gestapo, Heinrich Himmler, para encontrar formas de eliminar la homosexualidad», precisó el informe.

Incluso, The Jerusalem Post consultó sobre el tema a Peter Tatchell, activista LGBTQ y activista de derechos humanos. «Se supone que Argentina es una democracia. ¿Por qué honra a un hombre que simpatizaba con las ideas nazis de eugenesia y que albergó y ayudó a un criminal de guerra nazi?», expresó con tono interrogativo.

«Vaernet realizó experimentos con prisioneros homosexuales en el campo de concentración de Buchenwald, en un intento por desarrollar procedimientos médicos para borrar la homosexualidad», continuó. «Actuó con la aprobación personal del jefe de la Gestapo, Heinrich Himmler, quien estaba comprometido con el total eliminación de lo que denunció como ‘existencia anormal'», añadió.

Además Tatchell sostuvo que “Carrillo empleó personalmente a Vaernet, de acuerdo con el contrato que firmaron en 1947 para financiar su ‘especialidad científica’, que era tratamientos y curas para acabar con la homosexualidad. Carrillo debe haber estado al tanto de la evidencia del crimen de guerra contra Vaernet porque se informó en los medios de comunicación en ese momento, y hubo llamadas para que fuera extraditado a Europa para ser procesado».

Frente a esta controversia, el presidente de la DAIA, la representación política de la comunidad judía en la Argentina, Jorge Knoblovits, se manifestó primero cauteloso frente a la polémica y advirtió que “las instituciones no deben actuar por impulsos o para pretender presencia en medios sin antes certificar los trascendidos”. “La seriedad de las posiciones debe estar en sintonía con la veracidad de las informaciones. Si no es así, generamos antisemitismo y hacemos un dispendio de nuestro capital político”, expresó.

Si bien Knoblovits mostró prudencia, debido a que el billete aún no existe, aseguró que no dudaría en pronunciar su repudio en caso de que se confirme la emisión y destacó que ya han comunicado su rechazo a la elección de la figura del ex ministro de Salud para la moneda nacional.

El titular de la DAIA se reunió con Facundo Carrillo, nieto del ex ministro, Facundo Carrillo, actual secretario de Atención y Gestión Ciudadana del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, en un encuentro al que asistieron también el secretario general de la DAIA, Alejandro Zuchovicki, y su tesorero Marcos Cohen.

En el encuentro Facundo Carrillo defendió la figura de su abuelo al señalar que “no hay un sólo escrito de él” que demuestre admiración por el nazismo, y dijo que su familia había recibido esta “falsa noticia con mucho dolor”.

“Durante 48 horas estuvimos buscando antecedentes que acreditasen la falsa denuncia sobre Ramón Carrillo. Entendíamos que su nieto tenía derecho a ser recibido y a desacreditar lo que se dijo de su abuelo y a acreditar el vínculo de su abuelo con Israel. Ese vinculo lo comprobamos con el regalo del ministro de Salud israelí y con una carta de su amigo Chichilnisky, quien sostuvo a Carrillo en sus días en Brasil, donde vivió en la pobreza”, agregó, en tanto, Knoblovits.

Incluso otro nieto del sanitaria difundió una placa de reconocimiento que le entregó a su abuelo el Estado de Israel. “A Ramón Carrillo ministro de la Salud Pública República Argentina un pequeño recuerdo del ministro de la Salud Pública del Estado de Israel Joseph Serlin, Jerusalem 3 V 1954″, dice la distinción.